Tras el terremoto se generó una alerta de
tsunami para la costa pacífica de
Japón y otros países, incluidos
Nueva Zelanda,
Australia,
Rusia,
Guam,
Filipinas,
Indonesia,
Papúa Nueva Guinea,
Nauru,
Hawái,
Islas Marianas del Norte,
Estados Unidos,
Taiwán,
América Central,
México y en
Sudamérica,
Colombia,
Perú,
Ecuador y
Chile.
[24] La alerta de tsunami emitida por Japón fue la más grave en su escala local de alerta, lo que implica que se esperaba una ola de 10 metros de altura. FInalmente una ola de 0,5 metros golpeó la costa norte de Japón.
[25] La agencia de noticias
Kyodo informó que un tsunami de 4 metros de altura había golpeado la
Prefectura de Iwate en Japón. Se observó una ola de 10 metros de altura en el aeropuerto de Sendai, en la Prefectura de Miyagi,
[26] que quedó inundado, con olas que barrieron coches y edificios a medida que se adentraban en tierra.
[27]A las 23:33 horas (
PST), el
Servicio Meteorológico Nacional emitió un aviso de maremoto para la costa
alaskeña desde la bahía de
Chignik hasta la
Isla Attu, y vigilancia de maremoto para toda la costa pacífica de Canadá y Estados Unidos desde la bahía de Chignik a la frontera de California con México.
Luego del paso del tsunami, en el estado de
California en la costa oeste de
EEUU, se declaró estado de emergencia para los cuatro condados del norte afectados por el tsunami, cuyo impacto ha dejado numerosos destrozos en puertos y playas. El maremoto ha causado inundaciones en zonas costeras de Hawái, así como en puntos de los estados de
Oregón y
California. Uno de los lugares más afectados por el oleaje ha sido la localidad de
Crescent City, situada en una bahía del
condado de Del Norte conocida por ser vulnerable a los tsunamis. Su puerto quedó destruido por la marea y las embarcaciones sufrieron importantes daños, lo mismo que algunos edificios.
En
Hawái los habitantes de las zonas fueron trasladados a lugares seguros en centro comunitarios y escuelas, al tiempo que los turistas en
Waikiki fueron llevados a pisos altos de sus hoteles. En tanto, los caminos y las playas se vieron vacías cuando llegó el tsunami. La altura máxima de la ola del tsunami habría llegado sólo a los 50 centímetros
[cita requerida].
Al final de la tarde de ese día viernes algunos países centroamericanos como
Panamá,
Costa Rica,
Guatemala,
El Salvador y
Honduras ya habían suspendido el aviso preventivo acerca del tsunami, después de que las autoridades constaran que el efecto del terremoto asiático se ha limitado a unas casi imperceptibles olas en sus costas del Pacífico. Mientras tanto en
Nicaragua se suspendió la alerta a las 21.00 horas (03.00 GMT del día siguiente), después de que las olas también llegaran sin fuerza y no se registrara ninguna situación anormal. En
Colombia a pesar de no registrar cambios significativos en la costa, mantuvo la alerta en la costa Pacífica por gran parte del día 12 de marzo, debido a la posibilidad de que exista un fuerte oleaje.
Las primeras olas que se registraron en
Perú tuvieron entre 15 y 40 centímetros de altura, pese a lo cual las autoridades señalaron que van a mantener la vigilancia en previsión de que el siguiente oleaje pueda ser más intenso. En la
Isla de Pascua (
Chile) fue una de las primeras localidades en ser alertadas del maremoto, que con preocupación esperaron un escenario similar al observado en
Hawái. Un tren de cinco olas de pequeña altitud (50 centímetros) fue detectado en la noche. A las 04:08 (hora local) cesó el alerta de tsunami en
Rapa Nui.